lunes, 20 de septiembre de 2021

 

 










 





                                         OPERACIÓN AYUSO                                         

                                              Julio Antonio Vaquero iglesias

   Ayuso se ha desmelenado en sus últimas  declaraciones y ha dejado entrever  la finalidad estratégica de sus pretensiones. No es que  se acomode ante la necesidad que tiene de los votos de VOX para lograr sus pretensiones políticas madrileñas renunciando a su expresada y manifestada ideología liberal en cuestiones de valores y costumbres expresando lo que ya realmente sabíamos: que su pretendido liberalismo ( como por cierto el de su mentora Esperanza Aguirre) no era sino pura apariencia maquilladora de su verdadera ideología Esto es: pensamiento y valores neoliberales hasta los tuétanos en lo económico y tan  ultraderechista en cuestión de valores sociales como los de VOX, amén de trumpista como éstos en estrategias para hacerse como sea posible con el poder no sólo en el PP, sino también en el Estado  y en este caso bajo la dirección maquiavélica de ese siniestro personaje que es MAR  como se conoce en los medios políticos madrileños a su estratega en la sombra Miguel Ángel Rodríguez

  Ahora resulta que tras las huellas de VOX Ayuso se declara –desdiciéndose- como homófoba y racista con los emigrantes ( por cierto, que en eso parece que no se distingue gran cosa de las últimas posiciones del PP de Casado, dada su actitud en los foros europeos) y que tras las huellas y la dirección del think tank de Aznar ( ¿quién si no?) y los consejos de MAR, está lanzando una verdadera campaña contra Casado con la pretensión de hacerse con la dirección del partido y aspirar finalmente a convertirse en la próxima presidenta de Gobierno.

¿ Tiene Ayuso alguna posibilidad de conseguir esos objetivos?  La verdad es que ante las incoherencias de Casado, las estupideces de su consejero áulico, el señor Egea, que han dejado en el alero los principios del verdadero conservadurismo y se han dedicado a ejercer  una labor destructiva  de oposición a Sánchez (¡a la coalición gobernante ni agua!) incluso en verdaderos y evidentes  temas de Estado como fue el caso de la retirada de Afganistán, la posibilidad de que la operación Ayuso- Aznar tenga éxito, al menos  en la del control del Partido – en el  del desplazamiento de la coalición gobernante del  poder parece mucho más difícil- puede, sin duda, ser factible, dado el enorme influjo de la coalición  Ayuso- Aznar-  MAR y Esperanza Aguirre y los sectores neoliberales que están detrás de ella.

  Pero, incluso, las consecuencias de ese limitado éxito en el asalto al poder de la dirección del PP serían, sin duda, un añadido obstáculo más  para lograr los cambios de gran calado social que necesita nuestro país e, incluso, aún más para mantener y extender  los valores verdaderamente democráticos que debería inspirar siempre nuestra democracia.

(Publicado en las páginas de opinión de La Nueva España, de Oviedo)

domingo, 5 de septiembre de 2021

 

 


                                                La ministra incompetente

 

                                    OLIGOPOLIO ELECTRICO

                            JULIO ANTONIO VAQUERO IGLESIAS

El creciente y constante aumento del precio de la electricidad se está convirtiendo  en uno de los mayores problemas para la recuperación económica de nuestro país. Es el causante de una inflación de 3,3%, la máxima en casi una década y responsable de la crisis de numerosos pequeños negocios y de la situación de pobreza energética de una parte muy numerosa de nuestra población.

  La mayor parte de la población desconoce por su complejidad cómo se establece el precio de la electricidad y no acaba de entender tampoco cómo si es el  mismo sistema que el  establecido en el resto de los países de la Comunidad Europea, en la mayor parte de sus miembros no supone ese sistema la  creciente escalada de precios que estamos sufriendo en nuestro país y que dado el multiplicador efecto que tiene sobre la mayoría de los precios de cualquier clase de mercancía se está convirtiendo en la causa de la tremenda e imparable  alza de precios que estamos sufriendo, amén de las dificultades que supone para una gran mayoría de hogares hacer frente a la factura de la luz.

  Eso sí, nos llegan continúas noticias de los beneficios astronómicos  que están obteniendo las compañías eléctricas y nos quedamos boquiabiertos con las declaraciones de la ministra Ribera, que, sin duda, sabe muchísimo sobre el problema, pero que, ante esta gravísima situación, muestra su impotencia aludiendo a la “escasa empatía social” de las empresas suministradoras de la electricidad, , como si a las mismas les importase lo más mínimo las dificultades económicas y sociales de los consumidores y no sólo la cuenta de resultados de beneficios que obtienen sus empresas  con esos precios desproporcionados. Beneficios que son los que realmente  para ellos cotizan en bolsa. (Por Dios, señora ministra, de donde ha salido usted y nada menos que militando en un partido socialdemócrata).

 No es extraño que ante esta  grave situación y la inacción del ministerio correspondiente el otro partido que forma la coalición de gobierno proponga  expresar la oposición a esta inacción gubernamental con protestas en la calle, sobre todo, cuando los sindicatos que deberían canalizar la protesta de la ciudadanía siguen, como ya nos tienen acostumbrados  en estos tiempos, dando la callada por respuesta. Si el sistema establecido por la Unión Europea para establecer los precios de la electricidad no funciona en España y permite esa situación de oligopolio que estamos padeciendo, habrá que cambiarlo y mientras tanto establecer medidas drásticas  para impedir esa espiral creciente de los precios de la electricidad que está ahogando a miles de hogares y ciudadanos españoles y está causando además la crisis y la ruina de numerosos pequeños negocios en nuestro país.

Hay quien dice también que esta grave situación causada por el incremento acelerado del precio de la energía no es sino además un perversa maniobra de los poderes económicos para poner fin definitivamente al gobierno de izquierda que gobierna el país, ya que los efectos negativos de la pandemia no han logrado ponerlo contra las cuerdas. La verdad es que, de creer esta teoría de la conspiración, la inacción del sector del PSOE en el Gobierno ante este grave problema se lo estaría poniendo en bandeja.  

(Publicado en las páginas de opinión de La Nueva España, de Oviedo)